¿Cuál ha sido la banda sonora de este año? Si lo más complicado es decidir de todos los discos que han salido, que no han sido pocos, condensar en diez canciones lo más destacado de 2012 tampoco ha sido tarea fácil. Después de muchos quebraderos de cabeza, ésta ha sido la lista definitiva:
10. The Destroyed Room.- San Geronimo in the Morning. Si uno de los cortes de The Magic Indian Scene demuestra el buen hacer de la banda y su capacidad para conseguir canciones con una capacidad de emocionar tremenda, es ésta. Con una introducción muy bonita, una letra muy sentida y una intensidad que va creciendo, tiene todo el derecho a abrir este selecto Top.
9. Ty Segall.- You’re The Doctor. En un año como éste no podía faltar una canción de garage en este Top. Fiel al género, rápida y sin concesiones, divertida e ideal para moverlo, demuestra porque Ty Segall ha saltado a la palestra con tanta facilidad. Para ponerla en bucle y escucharla una y otra vez.
8. Toundra.- Marte (Mars). La mezcla de post-metal y post-rock de Toundra ha sonado tan fuerte en los medios como en un concierto de la banda. (III) ha sido blanco de elogios por parte de la crítica especializada (y no tan especializada) y en Frog The World estamos, por una vez, de acuerdo con el resto del mundo. Canciones como ésta son la causa de que nademos a favor de la corriente en este caso.
7. Beach Beach.- Plants. Los representantes del llamado punk tropical que más lejos han llegado lograron enganchar a través de este adelanto de su álbum Tasteless Peace. Rápida, directa y pegadiza, era la mejor carta de presentación de un disco que en líneas generales puede describirse con esos tres adjetivos. Estos mallorquines apuntan alto y canciones como ésta son la prueba.
6. Caspian.- Procellous. Ha sido un buen año para el post-rock, y una de las razones ha sido el último trabajo de Caspian. Procellous simboliza y compila lo que más nos gusta de un género, interpretado por uno de los grupos que mejor sabe hacerlo y que más firmemente cree en las claves de un género que, en contra de lo que muchos creen, sigue vivo y con mucho que enseñar. Un auténtico carrusel musical lleno de altibajos que hará las delicias de propios y extraños al post-rock.
5. Hot Water Music.- Drag My Body. Con este corte nos presentaban Exister, e inmediatamente teníamos unas ganas enormes de escuchar el disco completo. No son al 100% los de los primeros discos pero siguen sabiendo hacer canciones vibrantes y sentidas, que siempre logran tocar una fibra a quien la escucha. Chuck Ragan, Chris Wollard y el resto de la banda se dejan la vida tocando y eso siempre ha de premiarse.
4. Ulises Lima.- Waiting For The Summer. Abría nuestro recopilatorio veraniego y desde entonces nos ha acompañado como una constante. Post-hardcore con sabor a emo noventero, energía y añoranza para un corte tan intenso como melancólico. Una canción honesta y directa, algo que no es tan usual como debiera ser.
3. Cloud Nothings.- Stay Useless. El prestigio y reconocimiento de esta banda está subiendo como la espuma y las críticas de Attack On Memory son prueba de ello. Es difícil escoger una de sus canciones, pero si hay una de ellas que es fácil de escuchar y que engancha desde el primer momento es Stay Useless. Heredera de un sonido lo-fi, movida, pero con un fondo de tristeza, ha conseguido alcanzar el podio de esta lista.
2. Japandroids.- Evil’s Sway. Está cada vez más claro que 2012 ha sido el año de Japandroids, y con un álbum como Celebration Rock bajo el brazo no es de extrañar. Es muy fácil quedarse con el single, The House That Heaven Build, o con Fire’s Highway, la más enérgica del disco; pero dejando de lado la exuberancia de estas dos canciones, Evil’s Sway es la esencia de lo que hace a la banda única: contiene todas sus señas de identidad y resume en pocos minutos todo lo que nos gusta de Brian King y David Prowse.
1. Muerte y Destrucción.- La Isla de Los Conejos. El ejemplo perfecto de como una canción, a pesar de gustar desde el primer momento, va creciendo y creciendo hasta convertirse en la clara elección al mejor tema del año. Un inicio contundente, seguido de unos momentos más relajados que se convierten en un larguísimo crescendo que acaba con una de las explosiones instrumentales más intensas del año. Sin duda la banda sonora perfecta para ambientar ese apocalipsis que nunca acaba de llegar.