Buscar buenos discos de música parecida, o heredera, del 90s emo siempre es un reto comparable a buscar setas: están ahí esperando a ser escuchados, pero sólo si miras en los sitios adecuados les podrás ver. Por esa razón esta entrada recopila tres de los lanzamientos más destacados de este año; aunque ya ha habido algunos otros como el luminoso regreso de The Appleseed Cast o, en forma de EPs, el debut de Their/They’re/There o el Split entre Plaids y Football, Etc.
Los nuevos trabajos de Owen, Nai Harvest y The World Is A Beautiful Place & I Am No Longer Afraid To Die son una combinación entre juventud y veteranía, entre solera y exhuberancia, capaz de mostrar las distintas caras que puede ofrecer un género, desde su vertiente más tranquila y madura, hasta su lado más gritón y enérgico.
Owen.- L’ami du peuple
Mike Kinsella no está dispuesto a caer en el olvido, y en un corto espacio de unos meses ha participado en el EP de Their/They’re/There, y lanzado un nuevo disco de larga duración a la cabeza de Owen. Normalmente esta banda ha servido siempre para desatar la vena acústica de éste, y desarrollar sus pensamientos más íntimos. L’ami du peuple no es la excepción, aunque en esa ocasión añade algún arreglo electrónico y alguna guitarra más, dando una sensación más completa, alejándose de la idea de una banda unipersonal.
La ya aludida veteranía del rostro visible de Owen es un tema central en este disco: ya ronda los cuarenta años, y su visión del mundo ha ido evolucionando, y aunque su visión musical haya seguido una trayectoria constante, este último trabajo ofrece una perspectiva mucho más madura y cabal, aunque algo derrotista. A Mike Kinsella le pesan los años, y aunque sabe mantener su esencia, logra transmitir una sensación más experimentada, y también, más resabiada, algo más acostumbrada a los sinsabores que tan frecuentemente aparecen en sus letras. Así, lo más destacado de L’ami du peuple son Blues To Black, Love Is Not Enough, Bad Blood y A Fever, esta última la más similar a unos Cap’n Jazz ralentizados, actualizando a día de hoy, y a la edad de la cabeza visible de la banda el sonido que les hizo famosos en los noventa. Un disco recomendable para nostálgicos, pero también para todos aquellos que vuelvan querer a vivir, desde la perspectiva que da la experiencia, aquellos sentimientos adolescentes.
Nai Harvest.- WHATEVER
Una grata sorpresa que apareció a principios de año, y que ha tardado en darse a conocer, pero que probablemente despunte en breve. Con un estilo que recuerda bastante a Algernon Cadwallader, pero en forma de dúo, el debut de Nai Harvest es una muestra más que suficiente de como dos personas con ganas y talento pueden clavar un disco de 90s emo en pleno 2013.
El inicio con Whatever es prometedor, con una serie de cambios de ritmo y juegos de voces entre los dos componentes, pero con una clara voz guía, que se deja la garganta en todo momento: una manera inmejorable de romper el hielo y presentar un tema que seguro que se gana la complicidad del público en sus conciertos. Se atreven con ritmos más lentos en Twin Teaks, Distance, Etc o el final con To Be There; pero saben también añadirle potencia al género en cortes como Floor o Sitcom Fade-In, y en líneas generales todas las canciones imprimen en el ritmo una cierta progresión, que va creciendo y decreciendo por momentos, consiguiendo una impresión de continuidad y a la vez ruptura, capaz de inquietar e interesar a partes iguales. Dentro de un estilo musical tendente a la inmovilidad este álbum sienta pautas imaginativas, una innovación necesaria para su supervivencia, máxime cuando se atisban las posibilidades de que resurja. Como se dijo al principio de esta breve reseña, una grata sorpresa, que con suerte no se quedará tan sólo en eso, porque a Nai Harvest hay que observarles bien de cerca.
The World Is A Beautiful Place & I Am No Longer Afraid To Die.- Whenever, If Ever
Tras ese larguísimo e incómodo nombre se oculta una de las grandes promesas del sonido emo en la actualidad. Este nuevo disco no es su primera vuelta en el ruedo, y de manera tímida y gradual han ido haciéndose un nombre, cada vez más respetado entre los aficionados al género, máxime cuando cuentan con el apoyo de Topshelf Records, uno de los sellos, un sello que últimamente no hace más que darnos alegrías. Esta banda también se enmarca en el sonido más caótico y juvenil, pero es conocida por dar considerables bandazos y cambiar entre pasajes más alocados a momentos de relajación absoluta.
Después de una curiosa intro, Heartbeat In The Brain cumple todos los puntos anteriormente descritos, una fenomenal presentación para Whenever, If Ever. El segundo corte, Fightboat incluye una trompeta aludiendo claramente a los inicios del género, siendo una de las canciones con un estribillo más oscuro a pesar de su aparente claridad. Hay temas prácticamente instrumentales como You Will Never Go To Space o Ultimate Steve, donde la voz sólo aparece en la segunda mitad, y que demuestran el potencial de la banda tanto instrumentalmente como a nivel de composiciones. Otras canciones como Picture Of A Tree That Doesn’t Look Okay o The Layers Of Skin We Drag Around giran alrededor de la base de un bajo potente y que lleva la voz cantante. Los tres cortes finales son los más relajados: Gig Life, Low Light Assembly y Getting Sodas; y de estos, sólo el tercero consigue hacerse más original debido a su larga duración y cambios de registro. Como puede verse, un disco variado, hecho con mimo y que a pesar de enmarcarse claramente en un género, lo tuerce, mueve y cambia a su antojo. Una nueva muesca en los instrumentos de The World Is A Beautiful Place & I Am No Longer Afraid To Die, un grupo del que es fácil caer prendado, a pesar de su nombre.