No es la primera vez que aparecen en esta página los malagueños Shonen Bat, y aunque esta vez hayan decidido sacar su lanzamiento de forma algo tardía, no podía finalizar el Diciembre sin que apareciera una reseña de su último trabajo por Frog The World. Este mismo año unieron esfuerzos con Ulises Lima en un fantástico Split, pero ya tenían una nada desdeñable trayectoria y llevaban tiempo dando guerra bajo el ala de Otomo Recs. Ahora, ya acabando 2013, presentan un nuevo disco completo bajo el nombre de No Competition.

Una formación inquieta, en la que sus miembros tienen todos un considerable número de bandas (All Sharks, ya conocidos de esta página, y otras también interesantes como Otomo o Cuerda Roja), abrazando y desarrollando variopintos estilos, con una pasión y ganas pocas veces vista.

En el caso del grupo que nos ocupa, siguen desarrollando el sonido ya característico de la banda y que ha estado siempre presente en todos sus discos, EPs y Splits: emo de tintes noventeros con gotas de math rock y post-hardcore. Un estilo intrincado pero agradecido, ya que consigue minorar la frialdad de su complicación técnica a través de un tono intimista y aunque cercano, con ecos distantes.

Sólo con oir Self es muy probable acertar con el resto del contenido de No Competition. En este aspecto, es un disco sin sorpresas, purista a más no poder dentro de un concepto y un determinado estilo. Eso no significa que dentro del álbum, a pesar de su constancia y solidez, no quepan alegrías. Así Dani, Ernest, Right Thru, The Missing Link o Nerd logran destacar por encima de las demás, pero sin que se rompa la sensación de coherencia y cohesión de este trabajo. Es especialmente interesante la maestría técnica que de demuestran Shonen Bat en La Caída, una canción estrictamente instrumental y en la que, con la calma y contención que les caracteriza, sacan a relucir todas sus tablas.

No Competition es un trabajo agradecido, pero de entrada puede hacerse difícil para los oídos inexpertos. Está repleto de anciones que pueden hacer las delicias de los fanáticos del género, o seguidores de la banda que ya saben a que atenerse, y entran en el álbum perfectamente preparados. Pero para un atrevido explorador puede convertirse en una experiencia complicada por su aparente densidad. Eso no quiere decir que no deban de seguir intentándolo, porque después de un par de escuchas la recompensa es mayor. La música de Shonen Bat sabe premiar a quien la dedica tiempo, y ésa es una de sus características más destacables.

Por todas estas razones, No Competition es un disco purista  y para valientes, para investigadores y descubridores; aparte de para su público usual. Es un trabajo hecho con mimo y con una propuesta clara y diáfana, plagada de influencias y amor por la música. Sólo esto debería ser un buen argumento para darle una oportunidad, pero es que además su factura técnica y la elaboración de su ritmos es tan cuidada como atípica. En un año en el que se ha hablado tanto del revival del 90s emo, Shonen Bat, de los mejores en lo que hacen, han llegado casi al final, pero para poner los puntos sobre las íes.