Sin demasiados preámbulos, comenzamos la parte intermedia de esta larga lista, que desemboca inevitablemente en las diez posiciones más cotizadas. El encargado de abrir el primer puesto en esta ocasión es:
30. OHIOS.- Faceless. Otro ejemplo de una banda joven y emergente que ha dado un fuerte golpe de efecto en 2014. Con un buen disco de debut bajo el brazo, muchas ganas y una presencia destacada en un buen número de festivales nacionales, el futuro pinta muy bien para OHIOS.
29. Merchandise.- After The End. Aunque aún no sepan la diferencia entre un EP y un LP, la banda de Carson Cox sabe hacer muy buena música y lo demuestra en cada lanzamiento. Sin conseguir el impacto de Children Of Desire, pero con un disco trabajado, sentido e inquietante, se abren paso en nuestra lista.
28. The Smith Street Band.- Throw Me In The River. Uno de esos grupos a los que uno llega tarde y luego se arrepiente cuando escucha trabajos como este Throw Me In The River. De lo más destacable de la última oleada de punk con toques del estilo Florida – Gainesville y alrededores, a pesar de ser australianos.
27. The Lawrence Arms.- Metropole. Ya dijo Dan Ozzi muy acertadamente en su lista de lo mejor del año que el nuevo disco de los Larry Arms es perfecto para darte cuenta de que peinas canas, y además sentirte contento con ello. Y es que es lo que hay, ni ellos se vuelven más jóvenes ni nosotros tampoco, y este es un álbum para celebrarlo.
26. Rollercoaster Kills.- Evil Debt. Un disco complicado como pocos, y muy difícil de definir, pero definitivamente con algo muy especial. Un batiburrillo de estilos, desde el indie rock noventero hasta el post-hardcore, con tintes del sonido británico, pero sin estar exento de un toque personal y único. Un disco nacional tan llamativo como original.
25. Univers.- L’Estat Natural. Sin duda uno de los referentes y pilares del post punk nacional. Tras un EP más que recomendable, su nuevo largo no decepcionó, con canciones que exploran distintos ambientes y nos ofrecen un recorrido tan sistemático como variado del sonido de la banda.
24. Banner Pilot.- Souvenir. Es difícil recuperarse de un éxito como Collapser, un disco redondo en el que todas las canciones sin excepción eran temazos. Pero Banner Pilot no se dan por vencido y vuelven a la carga con Souvenir, un álbum correcto y con buenas canciones, que sin alcanzar a su trabajo de referencia, vuelve a enganchar.
23. Minor Empires. Hablar de una superbanda siempre suena a excesivo y a desastre en ciernes. Sin embargo, decir que un grupo tiene miembros de Toundra, Moonich y Nothink ya pinta bastante mejor. A camino entre el rock guitarrero más potente y el post-hardcore más complejo, Minor Empires debutan con un disco sorprendente, con una fuerte carga instrumental y con grandes temas.
22. Encono. Nueva promesa del post-hardcore nacional en su vertiente más autóctona, dicho esto como algo tremendamente positivo. Ha sido un año considerablemente bueno para este subgénero, y discos como el de Encono son la prueba fehaciente de ello.
21. The New Pornographers.- Brill Bruisers. Un disco algo controvertido, porque no ha causado todo el revuelo que debería. A pesar de ello, no se puede poner en duda la competencia de esta superbanda, que aúna los talentos de pesos pesados como Dan Bejar, A.C. Newman y Neko Case. Una lástima que tenga algunos temas que no acaban de cuajar, porque podría haber dado mucho más de sí.
20. Pianos Become The Teeth.- Keep You. A pesar de haber abandonado por completo el screamo y haber relajado muchísimo su estilo, Pianos Become The Teeth se han sacado de la manga un álbum adictivo, de los que saben removerte por dentro y lograr que vuelvas pidiendo más.
19. Ought.- More Than Any Other Day. Se van acercando las posiciones más cotizadas y siguen apareciendo discos tan inesperados como sorprendentes. Ought salieron aparentemente de la nada (concretamente de Montreal) y tras un primer disco autoproducido practicamente desconocido, dieron la campanada con este More Than Any Other Day.
18. The Van Pelt.- Imaginary Third. Tercer esperadísimo disco de la banda de Chris Leo, que parecía que jamás iba a salir, pero que por fin ha conseguido ver la luz en 2014. Todo lo que se podía esperar de ellos, sin excepción pero también sin sorpresas.
17. Protomartyr.- Under Color Of Official Right. Un disco oscuro y opresivo como pocos, pero con canciones trabajadas y que enganchan desde la primera escucha. Post punk con muy mala baba para disfrutar mientras lo pasas mal.
16. Against Me!.- Transgender Dysphoria Blues. Laura Jane Grace, convertida en la actualidad en todo un personaje mediático, tiene mucho que agradecer a este álbum. Tal vez Against Me! hayan cambiado, pero le siguen poniendo sentimiento y ganas, y se refleja en todos sus cortes. Un disco significativo y con un fondo más que interesante.
15. La Dispute.- Rooms Of The House. Tanto por concepto como por cada uno de los temas de su último disco, La Dispute merecían un puesto destacado en esta lista. Cada canción es una fotografía, un recuerdo congelado en el tiempo, guardado en las habitaciones de una hipotética casa. Tan interesante como efectivo.
14. Swans.- To Be Kind. La locura de Michael Gira y el resto de Swans no cesa, con su estilo único, nunca visto y en ocasiones incomprensible. Imposibles de anclar en un género, y libres de toda atadura, incluso de las suyas propias, vuelven a sacar un álbum que ha dejado anonadado a crítica y público.
13. The Muffs.- Whoop Dee Doo. En la humilde opinión del que suscribe, uno de los grandes olvidados en la mayor parte de las listas de fin de año. Puede que The Muffs no inventen nada, pero sacar un álbum tan enérgico, divertido y en el que ninguna canción haga aguas, es todo un reto.
12. Real Estate.- Atlas. Fue una de las primeras reseñas del año, y a día de hoy nos mantenemos en lo dicho: es un disco tan cuidado, tan bonito y tan lleno de emoción, que es imposible no contagiarse de su espíritu. Así son Real Estate, y por ello, mientras sigan haciendo música con tanta pasión y mimo, seguirán apareciendo en este tipo de listas.
11. Death From Above 1979.- The Physical World. A las puertas de los diez puestos más deseados se queda el dúo canadiense Death From Above 1979. Y es que a pesar de los méritos de The Physical World, no se han atrevido a ir más allá del sonido de su disco de debut. Aún así, grandes y contundentes temas, con su estilo tan particular como identificable y único.
¡No os perdáis mañana el Top 10 con los mejores diez discos de 2014!