Los Diarios del Hipster: Discos Para el Verano (I)

El hecho de que más de uno se pusiera del revés la noche de San Juan sólo puede significar una cosa: ha llegado el verano. Y si algo nos va quedando claro a todos, especialmente con el paso de los años, es que no estamos ante una mera estación, sino ante un estado mental. Cuerpo y alma desarrollan una serie de necesidades que van más allá del mero refrescarse porque hacer calor; y como no podía ser de otra manera, hay ciertos tipos de música que apetecen más que otros en esta situación.

Por esta razón en las oficinas de Frog The World redoblamos esfuerzos y vamos a intentar recoger los discos estivales que se nos antojen más adecuados para los  días en los que estamos inmersos: lo-fi, punk pop, psicodelia, surf rock… todo aquello que huela a días eternos, mar y montaña, y como no, vacaciones.

Pinact.- Stand Still And Rot

Pinact AnxietyEs difícil no hacer caso a una banda cuando su principal referencia son Japandroids. El actual silencio de estos últimos hace que tomemos cualquier oportunidad de escuchar algo similar, o que al menos, les haga justicia. Es bastante evidente que Pinact  saben en quién fijarse a la hora de hacer su debut, y a pesar de ser unos novatos, hacen lo posible por no caer en el plagio descarado y aportar algo fresco y nuevo.

Stand Still And Rot tiene mucho del primer álbum de Japandroids, especialmente en lo referente a su energía, falta de complejos y arrojo; pero se aleja de aquellos elementos de stoner que lo caracterizaban, sin recurrir tampoco al rock desatado de su último trabajo. Pinact se desmarcan yendo por las lindes de la psicodelia garajera, en la línea de Thee Oh Sees, Wavves o de bandas lo-fi contemporáneas que ya han pasado por esta página como Meat Wave o Menace Beach.

Nos encontramos ante otro «grupo batidora»: post-hardcore fiestero y coreable, lo-fi rápido y rabioso, psicodelia con garra… todo ello bastante bien hecho y sin grietas apreciables en su sonido. Es muy fácil engancharse a Pinact y temas como la nerviosa Anxiety, la buenrollera Brew o la más relajada The Beginning Of The End les avalan.

Surfer Blood.- 1000 Palms

12 Jacket (3mm Spine) [GDOB-30H3-007}Siempre intentamos evitar los subgéneros tremendamente específicos, pero acabamos recurriendo a ellos aunque sólo sea por lo descriptivos que pueden llegar a resultar. En este caso estamos ese famoso punk tropical puesto en boca de todos por Wavves, más conocidos y con desigual reconocimiento debido a los excesos fácticos y verbales de sus componentes. En este sentido, Surfer Blood juegan a ser la hermana menos agraciada, tanto por sus propios roces con la prensa especializada y con la justicia, así como por su desigual trayectoria.

1000 Palms es su tercer disco de estudio, que sigue a Pythons, un álbum que podría y debería haber dado mucho más de sí, especialmente cuando debutaron con una auténtico bomba llamada Astro Coast. Su último trabajo confirma el camino descendente en el que Surfer Blood se encuentran de manera irremediable. Es innegable su aptitud para hacer canciones divertidas y agradecidas, con regustillo indie y guitarreo de baja fidelidad, pero también clónicas y vacías, sin alma. Tienen un atractivo que consigue que sea casi imposible no interesarse por sus lanzamientos, y porque siempre ocultan cortes notables como la alegre Grand Inquisitor o la misteriosa I Can’t Explain, pero que a la postre no logran eclipsar que han pasado a ser un grupo de temas y no de discos.  Hay tiempo para redimirse, y espero en mi próxima reseña tener que reconocer mi error, pero a fecha de hoy, la relevancia de Surfer Blood se va diluyendo, especialmente a medida que surgen nuevas bandas con propuestas más originales y llamativas.

Warm Soda.- Symbolic Dream

CF-054cover¿A quién le amarga un dulce? ¿A quién le puede disgutar Warm Soda? La respuesta es la misma para ambas preguntas. Es una banda capaz de caer bien a cualquiera, de mezclar géneros imposibles (punk pop, glam rock, power pop, garage rock, lo-fi…) y hacer canciones como churros sin bajar el listón, sin darse importancia y sin ningún tipo de complejos. Además tienen la gran virtud de apelar a los grandes clásicos, sin dejar de tener un sonido propio y distinguidamente contemporáneo.

Todo esto suena genial en líneas generales, y es que ninguna canción de la banda, ni de Symbolic Dream, para ser concretos, es mediocre ni disgusta. El problema puede surgir cuando la banda parece no ser capaz de salir de su zona de confort. Los temas de este nuevo álbum saben diferenciarse lo suficiente unos de otros, pero al escuchar el disco del tirón, es complicado no acabar con una sensación de repetición, tanto en la temática como en lo puramente musical. Cualquier trabajo de Warm Soda sirve para animar a un muerto y Symbolic Dream está muy lejos de ser la excepción, pero hay que reconocer que la sorpresa que supuso Someone For You se ha paliado bastante y ahora están rozando el borde del precipicio del «más-de-lo-mismo». Su próximo álbum, que a este ritmo, caerá el año que viene, ha de aportar novedades, o supondrá el declive de una banda que empezó siendo muy prometedora. Pero por ahora, todo sigue siendo tan fácil como dejarse llevar por canciones como las divertidísimas I Wanna Know Her y I Know That Cure, o la sensible Lemonade Lullaby.

Anuncio publicitario
Esta entrada fue publicada en Los Diarios del Hipster y etiquetada , , , , , , , , , , , , , , , . Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s