En una nota personal, me es bastante difícil separar la trayectoria de The xx de mis propias experiencias, así que toca empezar esta reseña con un poco de historieta: tras quedarme absolutamente prendado de su debut allá por el año 2009, en 2012 me llevé dos jarrazos de agua fría prácticamente consecutivos: el primero fue la sesión de Jamie xx en el Primavera Sound, y el segundo, algo más leve, cuando escuché por primera vez Coexist.
Posteriormente el tiempo ha enmendado las cosas, Jamie xx ha sacado un disco en solitario notable y Coexist ganaba bastante tras varias escuchas a pesar de que no estuviera al nivel del primer trabajo de la formación londinense. Por estas razones, mi primer enfoque de I See You fue la prudencia y las expectativas moderadas, ante la posibilidad de un nuevo inicial chasco.
Curiosamente, el primero de los adelantos de I See You, On Hold, al final ha resultado premonitorio de lo que muchos esperaban: la esencia de In Colour, el disco en solitario de Jamie xx ha permeado este nuevo trabajo, fusionando su carrera individual con su experiencia compartida con Romy Madley Croft y Oliver Sims. Sin ninguna duda es un paso lógico, especialmente cuando el peso de la composición recae sobre sus hombros.
Gracias a esta evolución pasamos de la monocromía elegante y minimalista de su primer trabajo a una paleta de colores mucho más amplia, pero sin olvidar los toques clásicos y más tradicionales de sus inicios. No todo son samples, efectos y percusión programada, las cuerdas siguen teniendo un peso muy importante en la música de The xx, y el hecho de que podamos hablar de progresión o evolución, y no de ruptura, hace a I See You un disco agradecido tanto para los nuevos oyentes, como para los que vienen atraídos por la carrera de Jamie xx, o por los fanáticos de larga data.
Al contrario de lo que sucedió con Coexist, I See You potencia y desarrolla los puntos álgidos del sonido de la banda, e introduce las aventuras en solitario de Jamie xx con acierto, y sin que la amalgama de estilos suene forzada o contradictoria.
Así, Dangerous suena nueva y excitante, pero Say Something Loving es un retorno a los orígenes, centrada en el juego de voces de Romy y Oliver, uno de esos duetos intensos tan efectivos como íntimos. El toque R&B que otras veces se mostraba de forma velada y puntual es protagonista en canciones como Lips, en su vertiente más divertida en On Hold con la presencia acelerada de Hall & Oates, o de manera luminosa en la final Test Me. Los cortes más clásicos con sus juegos de claroscuros se encuentran en la mitad del disco, siendo A Violent Noise, la delicada Performance o la animada I Dare You buenos ejemplos de esto. La mezcla de estilos es patente en Replica, una canción llena de capas y matices, o en Brave For You, un corte con silencios y percusión vibrante.
No es un álbum indiscutible, y tendrá lógicamente sus detractores, pero no se le puede echar en cara no ser valiente, combinar lo que ya sabían que funcionaba con elementos nuevos, e introducir sus experiencias ajenas a la banda dentro de su sonido, como una parte integrante de su nuevo sonido. Hay que reconocer que The xx han vuelto por la puerta grande, y que I See You es un disco que pretende ser objeto de discusiones, copar los medios, y aspirar a llegar muy lejos a lo largo de 2017.